Déjate querer y no me niegues ese abrazo que ansío cada vez al verte,
deseo más cuando me hablas cual inoportuno corazón que quiere ser encarcelado,
sin agua y sin pan, pero contigo.
Mi cuerpo es la de un infante cuando tocamos esos temas que consideras rojos y ya empiezo a imaginar que sería el mejor de los alumnos, tan capaz de hasta obtener un diploma en confianza eterna.
Tú confianza en mí.
Tocar tus cabellos castaños son el anhelo de muchos, lo sé muy bien, porque antes que me conocieras yo sabía de ti y tus encantos.
Pensé que exageraban cuando escuchaba el fracaso de alguno y la cita conseguida por otro, más ninguno ha sido señalado como amigo, ese título que llevo hoy con la esperanza de que como todo en la vida, evolucione.
Aunque escuché de tus labios que es lo mejor que puedes dar.
¡No es así mujer!
Sólo te has equivocado de buzón donde depositabas tus ilusiones, sueños e ideales a diario.
Debes volver a levantar las persianas para lucir las cristaleras más hermosas, aunque sean pequeñas son más naturales que el nacimiento del sol para mí.
Deja que afloren esas lágrimas al palpitar tu corazón por el que se fue llevándose las cartas del buzón sin dejarte respuestas. Quisiera secar esas gotas de tus mejillas cubriéndolas con sonrisas, así tus perfectos dientes hicieran su mejor despliegue escenográfico y como siempre yo los he de recordar hasta que volvamos a chocar.
Sabe tu memoria, mi amada ausente,que mis intentos por sorprenderte han sido innumerables y algunos tienen estrella, mientras otros fueron eludidos por tu desconfianza.
Por qué entonces no coges mi mano y comenzamos a bailar esta canción para siempre.
deseo más cuando me hablas cual inoportuno corazón que quiere ser encarcelado,
sin agua y sin pan, pero contigo.
Mi cuerpo es la de un infante cuando tocamos esos temas que consideras rojos y ya empiezo a imaginar que sería el mejor de los alumnos, tan capaz de hasta obtener un diploma en confianza eterna.
Tú confianza en mí.
Tocar tus cabellos castaños son el anhelo de muchos, lo sé muy bien, porque antes que me conocieras yo sabía de ti y tus encantos.
Pensé que exageraban cuando escuchaba el fracaso de alguno y la cita conseguida por otro, más ninguno ha sido señalado como amigo, ese título que llevo hoy con la esperanza de que como todo en la vida, evolucione.
Aunque escuché de tus labios que es lo mejor que puedes dar.
¡No es así mujer!
Sólo te has equivocado de buzón donde depositabas tus ilusiones, sueños e ideales a diario.
Debes volver a levantar las persianas para lucir las cristaleras más hermosas, aunque sean pequeñas son más naturales que el nacimiento del sol para mí.
Deja que afloren esas lágrimas al palpitar tu corazón por el que se fue llevándose las cartas del buzón sin dejarte respuestas. Quisiera secar esas gotas de tus mejillas cubriéndolas con sonrisas, así tus perfectos dientes hicieran su mejor despliegue escenográfico y como siempre yo los he de recordar hasta que volvamos a chocar.
Sabe tu memoria, mi amada ausente,que mis intentos por sorprenderte han sido innumerables y algunos tienen estrella, mientras otros fueron eludidos por tu desconfianza.
Por qué entonces no coges mi mano y comenzamos a bailar esta canción para siempre.