Seguidores

lunes, septiembre 22, 2014

Compañera de Vida

Si confieso a gran voz que no disfruto lavar los trastes del hogar y mucho menos los ajenos, algunos se atreven a llamarme floja y otros adjetivos machistas inclusive, pero tú mi amado compañero sonríes y luego observas cómo  esa chica floja te exige poner la basura en su lugar. La que prefiere limpiar todo con lejía y luego complementar con aromas suaves. Esa señorita que traza el destino de cada objeto llegado a casa es la que va a tu lado. 

A veces te haces el ciego y das por sentado que dormiré todo el día porque me gustan los gatos, ni terminas el pensamiento y ya me ves jalándote las sábanas informándote que ya es de día y hay que abrir las ventanas. 

Soy la que hace chillar a la tetera algunas mañanas,la que observa por el tragaluz a esos pajaritos enamoradores de aquel arbolito,la que disfruta ponerse tus polos porque me quedan como vestidos, la que no puede dormir sin abrazarte,la que escribe mientras duermes, la que te recuerda que eres importante cada día porque sabes hablar con el corazón por encima del enojo y el orgullo.  Sabes que puedo ser y hacer más, siempre que haya miel en tu hablar como proceder.

¿Realmente soy feminista?
No creo serlo, simplemente disfruto la existencia de la cortesía, el buen hablar, la buena comida, el buen cine, etc etc. 
Seré tu compañera de vida, y ese lugar no hay Galaxy ni tarjeta que lo ocupe (con eso digo mucho).

Así estamos: Lloviendo en Primavera

Una mañana más, no iba tarde, llevaba casaca  acolchada , pantalón de rayas grises y con el carmín negro para sujetar mi cabello aún mojado tras la ducha alarmante que me di esa madrugada. 

Recuerdo que caminaba como siempre; mirando a las pocas personas como saludándolas con la mirada, observando también el camino para no tropezar, acomodaba la larga chalina sobre mi cuello para que el aire tibio de mi cuerpo se quedara conmigo, así iba bien, parecía ir bien (como un día normal)

¿Cómo pasó? ¿En qué lugar?¿Quien más lo sabe? ¿Estás bien? entre otras cuestiones similares bordean mi mente cada día y noche, me pregunto lo mismo intentando hallar la respuesta clara como estas líneas. El sueño me abandona, las pesadillas me recogen ahora más que antes. Se ha revuelto todo señores. Las historias de oscuridad han logrado tocar mi confiado corazón y, si hoy late, es porque alberga la insípida esperanza  de que pronto saldrá el arco iris. 

Aún hay ventanas empañadas por la lluvia primaveral.